Taller de móviles y tabletas digitales

El jueves 13 de diciembre participé en la sesión formativa del profesorado del primer encuentro intercentros de la XVIII Audiencia Pública a los chicos y chicas de Barcelona.

A través de Espiral, se organizó un taller de dispositivos móviles dirigidos al profesorado de sexto de primaria a bachillerato.

Cada vez son más los alumnos que disponen de un teléfono inteligente y si a esto le sumamos la aparición en el mercado tecnológico de las tabletas táctiles, se abre un camino inexplorado en el que aparecen elementos muy interesantes de cara a su aplicación en la educación.
 

En el taller presentamos diferentes experiencias que se han llevado a cabo en las aulas: desde la utilización de códigos QR para acceder a la información de una calle, un monumento, una pintura, un trabajo manual, o las características de un ordenador de alumnos de informática de FP, a experiencias de grabación de podcast para mejorar la expresión oral y la velocidad lectora, grabaciones de vídeo de un minuto, edición de imágenes, participación desde el móvil en el blog colaborativo de aula, participación en un proyecto colaborativo estatal, etc.

Además vieron que estos dispositivos se convierten en grandes bibliotecas, enciclopedias, diccionarios de cualquier lengua, revistas, periódicos, radios de todo el mundo, centros de aprendizajes de idiomas, escuela de música, y un largo etc.

Los alumnos pueden acceder a miles de contenidos educativos, pero su potencial está en que también pueden ser creadores: vídeos, podcast, documentos, creaciones artísticas de todo tipo, … y además pueden trabajar de forma colaborativa compartiendo documentos, presentaciones, formularios.

También vimos algunos ejemplos de herramientas de gestión: agendas, calendarios, organización de tareas, blocs de notas, espacios virtuales de almacenamiento...

Realmente unas herramientas con gran potencial educativo aún por descubrir y experimentar.

Debemos enseñar a los alumnos que estos dispositivos pueden servir mucho más que para entretenerse, comunicarse o participar en las redes sociales, no es una moda, y sí la excusa perfecta para introducir cambios en nuestra manera de hacer como docentes: los alumnos deben pasar de ser observadores pasivos a participantes activos, generadores de conocimiento y colaboradores de la inteligencia colectiva.

Sin duda alguna una excelente oportunidad y un gran reto para incorporar en las nuestras aulas, una metodología y una forma de hacer más adecuada a las nuevas generaciones y la época que nos toca vivir.